' A. olum. 5. tul. í' e v 1 t . 1 v 1 . . - i (, .lili y r ' , i - sai . - ;f 4 'i 4 Te-'"M,I;"' r-? s '-...-g á - i J í- - ' i i J f ; ( M SABADO 9 DÉ ENERO DÉ 1830, "' "-" -". rüÉRTO-RICO 9 DE ENERO DÉ 183G. ' DISCURSO culo por el Exorno. Sr, Procer del Reino, Presidente. Gobernador y Capitán general de esta JsUt el día 2 de Enero de este ano en a solemne apertura del tribunal superior de esta provincia SEÑORES: Presidente del tribunal superior de esta provincia, faltarla al deber que me impone la ley, y á la voz de mi conciencia si en el dia solemne de su apertura no me presentase á rendir el debido ho'mcnage á la diosa que venerán sus cultos, y á dar gíacias en nombre de S. M. á los dignos ministros que lo com ponen por los trabajos concluidos en el afio que espiró, animan dolos al mismo tiempo á seguir la senda tan hábilmente trazada por sus talentos para el que hoy empieza. Si esta provincia, cuyo mando ejerzo ha ya mas de trece .aflús, careció desde el dia - en que fue llamada á la vida social hasta esta nuestra época de una tan santa institución, conserva-1" dora cñ todos tiempos y en todos los paises del orden y de lá : y primera garantía del individuo, (á dicho de todos loá políticos): tan -enorme vacio ha podido repararse al cabo' de treá í,d(is con la acertada elección de ministros que en suerte le cu p i, Ies que luchando sin cesar con Ls obstáculos que la ignoran cia y los intereses privados les opusieran, han logrado en poco ' tiempo presentar resultados ventajosos á la causa de la humanidad, que han hecho callar sus émulos, y les asegura el triunfo mas cení- J píeto. Si, 'se ñores, mi corazón se ha complacido el dia 2 1 del pa; sado, -'cuando, en visita general de' cárcel he tenido lugar de re parar que rmeiias hay presos (pie lo estuviesen antes de Julio, que las causas de todos, comprendiendo los arrestados en estos últimos meses, se hallan actualmente en estado plenario, y casi para sen tencia; que los encausados solamente permanecen en incomunica ción el corto tiempo" que media desde su arresto-hasta recibirle su declaración: que este acto esencial del juicio tiene lugar den tro de las primeras veinte y cuatro horas: que los presos son tra tados con todo los miramientos que la humanidad exije, sin que prisiones molestas. -ni crueles carceleros los. atormenten; y por iil: time, que ni en el seior Fiscal ni en el Relator quedaba una sola causa: he aqui los . resultólos de que' hablaba, qué deben . causar un placer verdadero ol hombre, eei ble, y honrar á sus autores; Ni que mas podrá hoy mi débil Voz. decir en este augus to lugar donde tienen su asiento las Virtudes que constituyen al magistrado: donde la justicia se mantiene coii el brillante esplen dor que a tan augusta deidad conviene; y adonde el malvado se anonada y confunde, y ni aun se atreve h mover su incierta planta? Mas el nuevo orden de cosas que ha de constituir á nues tra nación una de las primeras entre las civilizadas de la Europa, con sagra ciertos principios que el antiguo régimen atacará desde su! origen por creerlos contrarios á sus interesadas miras y a sus te nebrosos proyectos. Al mismo tiempo q e el Gobierno cuida de acomodar las leyes a las numerosas exigencias de la época, tari distintas de las que conocieron los siglos anteriores, cuida también de que el sistema, el poder judicial, por decirlo bien, aparezca lozano y vigoroso apoyo firme de las instituciones fundamental es; y única y principal garantía social. Pero acaso, como algunos creen, será que cí respeto ccbidd i la magistratura se abata 6 menoscabe, sera que el honor y pres que á tan augustas funciones siempre acompasaron hayan de aca bar de todo punto.? No señores: jamás en época ninguna lia se ñalado en todas las naciones tanto su poder la justicia como en la de libertad; pero tampoco ha sido una nación libre, 'sin que ks personas y propiedades hayan sido garantidas; y para llegar a este estado, forzoso le ha sido antes ser virtuosa; puntos son es tos que están dentro del - confín del poder de la magistratura, y que de ella reciben la vida y fuerza con que prosperan. Lo penetrante de estas verdades, y lo 'convencido que cstov de' su influencia me obligan á, hablar en una materia agena de .mi lega profesión, pero seré breve. La tendencia general de la época es la del progreso: lanío tiempo gimiera la triste humanidad víctima de preocupacionesy violencias sin . cuento: la conquista o la usurpación han sido el principio de todos los Gobiernos de la Europa; y de tan cena gosa fuente traen m. origen los deberes y los derechos. Los pri meros todos, se exigian.de los vencidos, los segundos todos per tenecían á los vencedores. Asi a cada nación la hemos visto di vidida en dos pueblos, de los cuales el uno se ocupo constante mente en buscar medios de c.splotar el otro. Pero el movimiento social que1 empezára al concluir la edad media, ensanchado v vi goroso con los alientos que recibió del descubrimiento de la im . preitta con el trato .y comunicación debidos ai comercio y -4 las empresas guerreras de la época, cambió la anublada fax del inun dó moderno: entonces el pueblo vencido libró batalla al venec dor; y ora triunfante, ora abatido, la generación de hoy los vé en lucha, aunque estendidos los buenos principios por todas par-, tes, no es dudoso el éxito de tan larga contienda: Las leyes en tiempos tan. aciagos fueron casi siempre ía eá gia- I Jt . M i presión de ta vnhmfíil l. vm corto numero de seres priviíeg dos, v el poder de ejecutarlas se confió á las mm mnni quizás ni á tiempos muy remotos-, ni á tierras cstraílss tendría mos que acudir, para ver en un solo rescripto creado el delito, establecida la pena, designado el culpable y condenado á muer te. Tal orden de cosas si con tal nombre puede ennoblecerse un régimen tan arbitrario, formó la Constitución de muchos tados: pero no era posible que tanta violencia, que tal olvido de las leyendo -la humanidad ni quedase impune, ni subsistiese por mucho tiempo, t t Los pueblos' reclamaron libertad: accediese á sus ruegos; I03 individuos pidieron garantías, y fue preciso acordárselas;0 entre ellas fue la primera la libertad y seguridad personal, y la li bertad y seguridad de la propiedad. Creóse para esto un poder separado en el ejercicio de sus funciones, del Gobierno, y libra en todo de la fuerza que aquel comanda; y viósc nacer al po der judicial independiente de todo otro, mantenedor él solo de las justas leyes, escudo del pueblo, y conservador de sus mas ca ros intereses. Los que debieran ejercerlo, á sus muchas luces y á su experiencia debía acompañarles un carácter moral jamás des mentido, que unido k la responsabilidad mas severa, y a su in movilidad, preservasen la causa de la humanidad de nuevos ata- Vl'.l,,1'. T' . I ques, y a ios inuiviuuos oe continuas alarmas. La nación mas adelantada hoy en todas as ciencia U hl püede decirse asi, en el arte d gobernar, uniendo a este principios Ciro indispensable, a saber, la Separación del hecho y del derechó en todas las causas, y mejorando 1 partes tedas da tma lien combinada institución, cuyo origen se pierde cnla r.a- ,Luia per un cene? su Sello á la obra, v & afianzó sólidamente. LlamSda hoy nuestra patria á. seguir la misma senda, !wc mos dar les primeros pasos, y muy en breve allanados los obstá culos que presenten anejas y desastrosas rutinas, constituirá el po der judicial cual conviene para que sea la mas completa salva, guardia de los derechos individuales, y cí fundamento de la n ros p cridad española. Un derecho que se disputa, un derecho que se viola: he aquí los casos á que pueden reducirse todas las operaciones' de la ju dicatura: es preciso decidir en el primero: en el segundo mdcm - - - 1