EL VIAJE DE CARRANZA
Una seriedad tan trabajada y decepcionada como
la nuestra, después de agotar las emociones más brus
cas y violentas, no ;-e interesa ni conmueve fácilmente j
con acontecimientos triviales, por raás que puedan te
ner mucha significación o trascendencia. Por eso. ex
cepción hecha de leu políticos, nadie se ha preocupado j
por la salida de Carranza de !a capital, en su viaje a ¡
Cuatro Ciénegas.
Y era natural que asi fuese, puesto que ostensi
blemente ese viaje obedece a graves cuestiones de
familia, por que. como se sabe, la señora de Carran
za se encuentra delicada de salud.
Sobre este particular corren los rumores más con
tradictorios, p~ro como ¡a maledicencia suele no te
ner diques, preferirles emitir comentarios, respetando»
como cumple a nuestro deber, los dolores ajeno».
Pero de todos modos, ese viaje de Carranza ha
venido a dar una no*.a política de subido color y de j
sabor muy intenso, por que dejó al frente dei mando J
militar en la capital de la República al más enconado J
enemigo de uno de las aspirantes a la Presidencia.
Este "golpe" de Carranca es de mucha significa
ción. y bien pudiera ser de efectos decisivos en ia cam
paña electoral. Carranza ha puesto y apretado las
espuelas en las hijares de un grupo político, que cons
tituye la mas seria de las pesadillas que agobian al
ex-prímer Jefe. Al proceder en esta forma, qu^ resul
ta algo más que desafio, una verdadera agresión. Ca
rranza ha demostrado estar resuelto a aniquilar a su
rival poniéndole encima a un encarnizado antagonista.
E] juego puede ser decisivo, no cabe duda, pe-j e;- tam
bién sumamente peligroso, como lo son todas esas im
posiciones bruscas, y una sola intemperancia mas. pue
de provocar serios trastornos.
Este paso de Carranza, en verdad difícil y atrevi
do, nos demuestra también con toda anticipación y cla
ridad. que los comicios no serán enteramente libres,
pues no se concibe la libertad política a que todos
aspiramos, con estos actos anticipados o precursores
de la imposición política.
Tan serios y trascendentales son estos hechos, tan
grande es su significación política, que muchos se han
resistido a creer en los motivos ostensibles de' viaje
de Carranza. La maniobra es. de todos modos, de ca
rácter político, aunque las causas del viaje hayan sido
de índole privado.
Es verdaderamente digno de llamar la atención
el hecho de que el ex-Primer Jefe haya dejado como
su segundo, con el mando militar directamente, e in- '■
directamente ccn el mando civil y política al mas apa- |
sionado de los enemigos del Partido Liberal Constitu- j
cionalista. Realmente. (arranza ha puesto al Partido
de su rival bajo la férula del antagonista, que ha que- ¡
dado en posibilidad de hacer y deshacer a su talante í
en cuestione* militares, civiles y políticas.
Asi lo han estimado también, según las recientes j
informaciones que hemos publicado, los directores del
Partido Liberal Constitucionalista. que consideran la
salida de ( arranza como un plan premeditado para de
jar en el Poder a un enemigo de ellos, con el objeto !
de que pueda combatirlos con la eficacia derivada de ¡
un interés personalisimo.
Esas mismas informaciones nos dan cuenta de
que los directores del Liberal Constitucionalista han
publicado una nota en la que se expresan claramente
en estos término*:
"El señor Carranza se ha alejado de la Capital...
Y un pregunto candidato a la Presidencia ha asumido
la jefatura militar de la plaza. LA INSEGURIDAD
PUBLICA RAYA EX LA NOVELESCO. Sociedades
de malhechores y de audaces ladror.es a la alta escue
la se enseñorean de la capital, retando cínicamente a
la policía y burlándose de ella en repetidas ocasio
nes. Y en medio de este bello espectáculo se inician
las amenazas y las persecuciones políticas, con carac
teres de maffia bien organizada para garantizar la im
punidad a los virtuosos "hermanos del capuchón."
Ayer, en uno de los cenáculos que se celebran a
puerta cerrada para tratar asuntos "que interesan al
país", o que pueden constituir "la salvación de la Pa
tria," se convino en atacar en la primera oportunidad
la persona y el domicilio del General Hili. que enca
beza al Partido Liberal Constitucional, sostenedor prin
cipal de la candidatura del General Obregón."
Ahora biea, de la banda de los virtuosos "herma
nes del Capuchón." se darán cuenta nuestros lecto
res por las siguientes informaciones que recibimos y
publicamos con toda oportunidad:
"Se acusa a González.—que es el jefe militar de j
la plaza.—de estar protegiendo a la nueva "maffia"
que ha sido organizada con el mote de "Hermanos del
Capuchón." y que es más terrible aún que la del
"Automóvil Gris," y de que se pretende garantizar la
impunidad de los individuos que forman la referida
maffia, ahora que se inician las persecuciones políticas.
X X X X
Basta pues lo transcrito, para que nos formemos j
idea ¿el concepto que se tiene del aludido jefe mili
tar. y del desprecio que le tienen, a pesar de las fuer
zas de que dispone, quienes se expresan en esos tér
minos.
Estas simples notas nos darán también idea de
la atmósfera política que se respira en México, y de
lo que es lógico prever en vista de tales circunstancias.
No han sido insensibles a la espoleada los miem- ¡
bros del Constitucional, puesto que han respondido en
términos tan duros. El terrible cargo formulado en las
lineas trascritas contra el jefe militar de México, re
dunda en descrédito para Carranza, puesto que se le
hace el cargo de haber puesto a la sociedad en las j
manos de aquél a quien se acusa clara y francamente,
como se ha visto, de ser el protector de los "herma- i
nos del capuchón" y del automóvil gris.
La opinión pública no puede menos de ver con
sobresalto estos incidentes, triviales en la apariencia, j
pero que en el fondo llevan un germen fatal que, al ¡
desarrollarse irremisiblemente, habrá de conducirnos j
a las mas graves consecuencias, si la sociedad sigue
indiferente y no hace un supremo esfuerzo por salvar- j
se así misma. En otros términos: todas estas cuestio
nes, y el gran problema de la sucesión presidencial,
deben resolverse en los comicios, pero en unos comi
cios libres, verdaderamente libres, en los que el arbi
tro sea exclusivamente la voluntad nacional, espon
táneamente expresada sin las pasiones y taxativas de
la fuerza militar.
De otro modo, la fuerza militar, ya dividida en
dos "clientelas" se destruirá a sí misma, y las elec
¡
ciones no se harán en los comida», sino en los cuar- !
teles, a cuartelazos y en los campos de batalla. Es
te primer paso de Carranza equivale a poner plena- i
mente el resultado de las elecciones en la fuerza mi- j
litar, y esto, francamente, es un error que nos augura, !
si se sigue por tal comino, muy graves acontecimien- i
tos. No sin motivo reina expectación y cunde la alar- J
ma por la República.
ACTUALIDADES EXTRANJERAS
—__j
LA JUVENTUD DE LOTI
Trnd. del francés pcm "La Prenda"
No olvido ni "Pescador de Islan
dia" ni *Mi hermano Y ves" ni la
meditación acerca de ia muerte del
Almirante Ccubart ri "Ramuntcho"
ni "El Desierto". Pero creo que el
autor de tan admirables páginas no
ha escrito nada más- bello que ese
nuevo libro "Primera juventud"
en el que evoca sus recuerdos de
adolescente. Durarte cinco años
nuestros ojos le har. prestado aten
ción más que a la srloria militar.
Era de justicia. Es tiempo de vol
verlos a la gloria de las letras. El
dia en que una incontestable obra
maestra viene a unirse a nuestro ya
tan rico patrimonio, nadie de nos
otros tiene el derecho de permane
ce-- indiferente.
"Hoy en que tedo va a terminar
para mi...." "Tentativa desespera
da de uno de sus hermanos que va
a hundirse en e! abismo...." "Las
estaciones les parecen de 'a muer
te...." Estas frases y otras seme
jantes, cue ?e encuentran en diver
sos lugares de la narración, nos des
cubren la intima significación de
ella. Este libro, que vuelve a trazar
los años de la primera juventud y
qu'e por una maravilla de arte les
conserva toda su frescura, ha sido
escrito en medio fie "la angustia de
acabar". Eso le da a cada linea y
n cada pa'abra verdadera sono
ridad. De alli le viene, a todo el
libro, lleno de detalles esquisitos y
de pinturas deliciosas, ;-u carácter
destrarrador.
Do esa fuga del tiempo, de esa
imposibilidad de retener todo lo que.
en el momento misino en que a ello
nos anegamos, se nos escapa, de esa
caida no interrumpida de las cosas
en la nada, de todo eso parece que
Loti tuvo, siendo un niño, la oscu
ra y dolcrcsa sensación. Ese es pro
bablemente el rasgo más profundo y
más original de su sensibilidad, el
que de antemano ha determinado la
calidad de su obra le escritor. A
cada momento nos habla de esa ma
nía que tuvo en todo tiempo de guar
dar pequeños cbjetos a los que es
taba unido algún recuerdo y de for
marse ccn ellos un museo que el año
siguiente no debería dejar de aumen
CROSICA LIT ERARIA
ta:*. "Con uaa obstinación pueril
y desolada, desde mi primera juven
tud. me he agotado en querer fijar
tedo Id que pasa y esre vano esfuer
zo de todos los dias tiene que haber
contribuido al desbaste de mi vida.
He querido detener el tiempo, re
construir aspectos borrados, conser
var viejas moradas, prclon;rar ár
boles que ya no tenían savia, eter
nizar hasta cosas insignificantes que
solo fueron efímeras, pero a las que
yo di la duración fantástica de las
momias y que ahora me espantan."
En estos últimos dias. el señor Paul
Bourjret le citaba estas lineas a uno
de nuestros coleeas. como aquellas
que. de.;de hace mucho tiempo, más
le habian conmovido. Ahora bien,
ya sea. que se trate de seres o de
cosas, sc.ntir que varr.os a perderlas
es lo qu? P'/C l.'s \u<dv» mucho má*s
taras, y nes hace comprender por qué
las amamos, y nos hace amarlas Jts
esperadamente.
Desdo esta s^mfcra en la que 61
se mantiene. Loe' ve ti pasadv que
rido np'.recérsel? más ium roso. con
la frescura intafa de s.; co'orido y
el encanto de su flor. '•Primera ju
ventud" toma las cosas en el lugar
mismo en donde las había dejado
"La no,-ela de un niño". Loti t;ene
trece años: acaba sus estudios en el
liceo de Rochefort; habla un poco
del tiempo q..ue estuvo en él. pero
insiste sobre todo lo que constituye
la dulzura de una infancia consen
tida en la casa paterna. Nada más
que lo de ordinario: los m:nudos in
cidentes de la vida cuotidiana en una
familia burguesa casi pobre, las vo
ces alternadas de las ancianas tías
y de la hermana recién casada, las
reuniones en el "salón rojo", los jue
eros. algo de música. Y esto es ex
quisito. Y para hacer sentir me
jor la intimidad del hogar, algunos
bruscos recuerdes de la vida de a
venturas y de viajes. A causa de
haber errado por todos les caminos
del vasto mundo, Loti siente más
profundamente el incomparable a
tractivo de un rincón bendito entre
ledos.
Ese rincón de tierra que sirvió de
marco a su infancia, no se cuenta |
entre los sitios más pintorescos de;
nuestra Francia. ¿Q^ié importa?
; Ka soñado tanto en esos bosques de ¡
la Limoise y de Fontbruant, de los
cuales todos los senderes le son fa
miliares! ¡Conoce tan bien a la na
turaleza del suelo y las particulari
dades de la vegetación, "el encanto
de los viejos suelos primitivos, esas
pequeñas plantas exquisitas que no
se arriesgan a brotar sino después
de siglos de tranquilidad y de silen
cio!"
Allí también el contraste es nota
ble con el cielo y con la flora de
es'is paises lejanos que más tarde
debería recorrer T.ot! y que -:e per
ciben mediante breves cinceladas.
Las llu vías torrenciales y el sol re- j
verberante de Pculo-Condor, las ciu
dades blancas de Islam, las arenas
del Senegal que se pasman de ca
lor, hacen gustar en todo su precio (
los aspectos mesurados de nuestros ¡
campes y los finos matices de núes ¡
tra atmósfera.
Esta sencilla narración se desarro
lla. cerno la vida misma, en una tra
ma continua y no se puede, sin fal
sear la armonía de ella, desprender
un solo episodio. Sin embargo, ¿có
mo no señalar las páginas acerca de
la muerte de su hermano, también
oficial de marina, llevado por la
enfermedad cuando volvía de la In
do-China?
Describe primero la llegada al a
pasible interior de la noticia d» la
muerte acaecida muy lejos, la "lectu
ra de !a última carta, de las reco
mendaciones supremas y. en aquel
circulo de familia, el tono del dolor
de cada uno. Todo esto con una no
ta verdaderamente justa en su dis
creción. Y después la idea que vie
ne a avivar las lamentaciones, de
que el oficial, muerto durante la
travesía seria sumergido en las a
! guas del golfo de Bengala. En lu
gar de ese sepulcro en donde les es
; permitido a los supervivientes el ir
a arrodillarse, la inmensidad del
mar. les infinitos movimientos de las
¡ olas
Más tarde. Loti debía navegar por
í eses parajes y pasar por el lugar
¡exacto en donde los despojos de su
ASUNTOS DEL DIA
Don Venustiano—a quien se le ha
ocurrido hacer un viaje familiar y ro
mántico, que no deja de haber ro
manticismo en eso de regresar a los
sitios consagrados por los recuer
dos de la juventud—Don Venustiano,
repetimos, debe estar echando chis
pas contra los señores Senadores.
Hace mucho tiempo que las de
mandas imperiosas de! público, que la
necesidad de prestigiarse un poco an
te la opinión nacional, que la urgen
cia, cada vez más imperiosa, de cas
tigar e impedir los desmanes de los
armados, obligaron al gobierno a lo
que por su propia voluntad no
hubiera hecho jamás: a poner en du
da la legitimidad de ¡os grados de sus
hombres de armas, a discutir su valor,
a manifestar que desconocía sus ha
zañas.
Porque bien visto, al gobierno no
le importa que don Fulano sea o no
sea general como Dios manda y por
propio y legítimo derecho, si ese ge
neral Fulano le es útil como mata
siete y asusta vecinos en una determi
nada región de! país, si sabe perse
guir a los alzados y denunciar a los
conspiradores; si es, en fin, un buen
amigo de ia causa.
Mas es el caso que el público que
ría que se moralizara el ejército,
que la sociedad pedía á grito pelado
que no la dejaran sola en poder de
esa muchedumbre con espada a! cin
to. para la que no hay respeto ni
temores, y el gobierno tuvo que ple
garse, por buenas o por malas, a la
exigencia nacional.
hermano habían desaparecido en las
olas. Era una de esas noches del
Ecuador de las que ninguno por sus
más bellas fosforescencias acuatoria
les, de tal manera que las estrellas
estaban pálidas, un mismo resplan
dor tristemente dulce que no se de
fendía. emanaba de todas las cosas
para difundirse por doquiera; se es
taba en una especie de neblina lu
minosa y el horizor-*e no tenía con
tornos.... Pero por ambos lados del
navio se veían pasar bajo el agua
tibia como continuos cohetes de fós
foro, que oran las estelas de grande?
pescados muy veloces, tiburones u o
tros comedores de muertos." Y en
tonces, por haber pasado por el lu
gar precisa en donde veinte años
antes había desaparecido lo que que
daba de su hermano Lotí experimentó
esa dulzura que nos produce la ilusión
de un acercamiento a través de! in
finito del espacio y del tiempo.
Lo que confunde cuando se leen
esas páginas es la sencillez de los
medios empleados por el artista.
Ningún rebuscamiento de efecto.
¡Qué lección para los rebuscadores
de palabras raras y para los que se
dedican a hacer frases complicadas!
¿De dónde le ha venido esta ma
nera de escribir? Nadie lo ha sabi
do. En el colegio parece que ocu
paba el lugar vigésimo primero sien
do veintidós los alumnos de
narración francesa. Ni el Gran Mo
no ni el Caimán verde que pressidie
ron sus estudios clásicos parecen
haberle servido de mucho. Siguió
mejor los consejos de su hermano que
le repetía: '"Escribe como piensas,
ten confianza en tus pequeños ele
mentos, sé natural." Lo que es, des
de este punto de vista, singularmen
te Interesante, y que no dejará de ser
señalado y comentado por los críti
cos literarios con algunos fragmen
tos de un "Diario" de cuando te
nía quince años, que Lotí insertó en
"Primera juventud". La frase tie
ne allí ya el dibujo y la música que
tanto debíamos admirar más tarde
en el estilo de Lotí. Es preciso, pues,
que aquello fuera un "dón". Y esa
es, por otra parte, la mejor de las
explicaciones. Esta magia del estilo.
Lotí la llevaba consigo, la tenía en
sí. Por lo tanto, lo mejor que podía
hacer evidentemente, era ser natu
ral... .
Pero también, los libros de esa es
pecie escapan al análisis. Se siente
profundamente su valor único y se
desespera de darse cuenta de él. Ha
ce treinta años que Jules Lernaitre,
que acababa de estudiar las primeras
novelas de Lotí, terminaba su ar
tículo de les "Contemporáneos" con
estas palabras: "'Apenas he sabido
decir que lo amaba". Y yo, a mi
vez, aceñas he sabido decir mi em
barazo y mi emoción ante este últi
> libro de una ternura tan pene
nte y de una tan grande de poe
b. —uno de los más bellos gritos
que le haya arrancado a un pecho j
humano el horror a la Nada.
REN'E DOUMIC,
de la Academia francesa.
(o)
LOS MINEROS DE OVIEDO QUIE
REN AHORA SIETE HORAS .
DE TRABAJO
Del Servicio Especial Ue LA PRENSA
MADRID. Septiembre 2P.—De
acuerdo con un telegrama recibido
de Oviedo, los mineros de esa región
han sometido a sus patrones una de
manda para que establezca desde
luego la jornada de siete horas de
trabajo, amenazándolos con decla
rarse en huelga si no se accedece a
ello.
Esta demanda ha causado gran sor
presa en vista de que acaba de con
cedérseles la jornada de ocho horas
que pidieron antes lo mismo ffie los
demás trabajadores, pero los mineros
arguyen diciendo que su trabajo es
mucho más pesado que el de los de
más trabajadores y su salario menor
que el de estos
Además, le encontro al asunto su
lado bueno, que todos los asuntos lo
tienen, en cuanto se les sepa buscar:
el de que ese seria un buen procedi
miento para quitarse de encima a
muchos militares que se le estaban
levantando más de lo justo, que se
metían por los caminos de la políti
ca, y murmuraban del señor Carran
za y elogiaban al general Obregón.
Ello fué que se pidió a los gene
rales y jefes y oficiales que justifi
caran sus grados, que mostraran sus
hojas de servicios, que presentaran
pruebas, ya doc.-mentales, ya testi
moniales, de las hazañas que habían
j acometido, de los arrestos y de las
¡ audacias en las que se habían jugado
la vida, de los servicios prestados al
país, de su conducta privada y de sus
manejos públicos.
Se creó una comisión especial que
estudiase con detenimiento las tales
hojas de servicios, que debían ser pa
sadas al Senado, para la ratificación
o denegación de los grados.
Naturalmente, la comisión tuvo
buen cuidado de poner todas las ta
chas posibles a los militares no fran
camente afectos a Don \ enustiano, a
los obregonistas peligrosos, a los gon
zalistas tímidos o dubitativos, y una
vez cumplida tan justiciera labor,
fueron los papeles al Senado.
Y los señores Senadores, de una
manera casi unánime, declararon que
no había grado que mereciera apro
barse, y que tal ejército era una ma
ravilla de inmoralidad.
Y con tal motivo, de la tribuna del
Senado salieron acusaciones tremen
das contra el gobierno y contra el
ejército.
..Ahora bien: a don Venustiano le
importan muy poco las cámaras, las
cuáles está dispuesto a disolver el día
en que lo tenga a bien; pero al e
jército le tiene mucho miedo, y, so
bre todo, lo necesita mucho.
Un gobierno como el suyo, que ha
perdido tan por completo el apoyo
de la opinión pública, no cuenta sino
con el de las bayonetas, peligrosísi
mo apoyo que a lo mejor se trueca en
incontenible amenaza.
Por eso, en tanto que no haya di
nero para nada ni para nadie, los pa
gadores del ejército van por los ca
minos de México portando millones
de pesos^-que algunas veces se ro
ban—para pagar a ¡os generales. . . .
y a los soldados si alcanza.
Por eso don Venustiano reparte
todos los días premios y ascensos, y
por eso, cuando no hay más que da/
a los militares, se les da la impuni
dad de sus delitos.
Ahora bien, ¿qué milagros de es
plendidez, qué prodigios de concilia
ción, cuántos regalos y cuántos as
censos, tendrá que hacer y ordenar
don Venustiano, para paliar un tanto
los efectos de la indiscreción senato
rial?
Pedro RECIO.
DESEA AYUDAR A OTRAS
PERSONAS
La Sra. A. G. Wells, R. F. D.
Rocky Mouní, N. C., dice lo siguien
te: "No encuentro palabras adecua
das para encomiar a las "Foiey Kid
ney Pilis", en vista de los grandes
beneficios que me han proporcionado.
Sírvanse publicar este testimonio pa
ra bien de las personas que sufren".
La espalda adolorida, los músculos
cansados, la hinchazón de los párpa
dos y el estado general de cansan
cio y decaimiento, son síntomas de
que los ríñones y la vejiga no fun
cionan con regularidad. Las "Foley
Kidne.v Pilis" vigorizan los ríñones y
la vejiga. (Adv.)
^.uUUIMbUIIIIlili H 11
¡No puedo dormir! ¡No puedo comer! ¡N¿ siquiera
digerir lo poco que como!
Con una o dos dosts de 5
ARMY & NAVY
DYSPEPSIA TABLETS
Será suficiente para "que
l'd. se sienta diez años más
¡oven. Es el mejor remedio
conocido para la Constipa
ción, Estómago Agrio, Dis
pepsia, etc.
Esiá a la venta, al precio de 25c caja, por todas las
droguerías, o se man a, al recibo de su importe por
U. S. ARMY & NAVY TABLET COMPANY.
260 West Broadway, — New York, N. Y.
LEA USTED ÉSTO
QUE LE CONVIENE
Algunas personas en su desespera
ción por alguna enfermedad de los
riñones que no han podido combatir
con éxito, tales cómo; dolor de espalda,
dolor de caderas y lomos, hinchazón
de las muñecas, piernas y pantorrillas,
reumatismo, cansancio, flojedad de laí
piernas, catarro o inflamación de !a
vejiga, ardor y quemazón al hacer
aguas, derrames voluntarios durante
la noche y orina de color sanguinolento
o con sedimento; desconfían de tales
o cuales preparaciones de patente. A
esas personas Ies conviene probar las
Pildoras "Mitchella" para los Ri
ñones y seguramente que bendecirán
haber tenido la oportunidad de haber
las ensayado. Estando los riñones en
estado normal y saludable, según el
destino que les dio la naturaleza, todos
los productos venenosos que se acumu
lan en el organismo, son eliminados .
por las orinas, pero cuando los riñones
se hallan congestionados o inactivos
por diferentes enfermedades, esos pro
ductos nocivos en vez de pasar a las
Con seguridad en las Farmaci;
tonio Drug Co.," San Antonio y "
orinas pasan a !a sangre y por ella
a todos los tejidos impregnándolos y
trayendo un envenenamiento cada vez
más grave, llegando en ocasiones a
producir trastornos mortales. Tene
mos a disposición del público un buen
número de testimonios de personas
idóneas y caracterizadas de distintos
paises, en que nos rinden, en una
forma que revela mucha sinceridad,
su agradecimiento por el éxito que han
alcanzado con las Pildoras "Mitche
11a" para los Ríñones. En las d¡«
recciones que acompaña a cada frasco,
se dan a conocer más en detalle las
enfermedades de los ríñones que haB
sido dominadas con el uso de este
gran específico, .y si Vd. padece de
cualquiera enfermedad de los ríñones,
no debe vacilar en hacer un ensayo ,
con las Pildoras "Mitchella" para
los Ríñones, especialmente sí no ha
obtenido Vd. resultados satisfactorios
con otros medicamentos vendidos para
este fin. Pídaias en las Farmacias y
Droguerías y no acepte Vd. sustitutos.
is "Río Grande," "El Paso; "San An
Brunswig Drug Co.", Los Angeles.
HERMOSO CATALOGO GRATIS
BOX
351-353 N. MAIN ST.¡
Los Angeles, Calif.
Acabamos de publicar, y estamos repartiendo ENTERAMENTE
GRATIS, a todo e! que nos lo pida, un bonito Catálogo en Español,
I con precios muy baratos en Ropa para Caballeros y Señoras; Telas,
Zapatos, Sombreros, Muebles y Utiles de Casa; Fonógrafos, Bicicle
tas, etr„ etc.
Pídanoslo HOY MISMO, enviándonoa rl cupón adjunto:
SRS. MATO y COMPAÑIA.
CUPON
P. O. Box 1052.
Los Andele», Cal.
Si: obligación p.ira mi. dt - ii.yuna especie, sírvanse mandarme íti Catá
logo lustrado, en Español, que están repartiendo GRATIS.
Mi nombre es
Mi dirección
Ciudad Estado
j,^3KE72aSSE3BE
I DEVD.
i COMO
I MEXl
¡ CANO
ESPE
RAMOS
I SU PA
¡ TROCI
I m..
PROTE
JA EL
COMER
CIO DE
SUS
PAISA
NOS.
¡¡MEXICANOS!!
Nadie puede ofrecerles discos do ULTIMA NOVEDAD como nosotros.
IEsta es ia UNICA CASA que manda EXPRESAMENTE GRABAR DISCOS MEXICA- -
NOS. Nosotros no CONTAMOS TAN SOLO con un DEPARTAMENTO MEXICANO,
sino todo NUESTRO ESTABLECIMIENTO es el UNICO NETAMENTE MEXICANO y j¡
que con ORGULLO ostenta SU NACIONALIDAD.
"REPERTORIO MUSICAL MEXICANO."
LA UNICA CASA MEXICANA DE MUSICA MEXICANA PARA LOS MEXICANOS.
FONOGRAFOS Y DISCOS DOBLES.
" COLUMBIA "
408 N. Main St MaURICIO CALDERON, Prop. Los Angeles, CaL
PIDA USTED NUESTRO NUEVO CATALOGO GENERAL GRATIS.
y rrTilín n ——