Newspaper Page Text
i 1 , i 5 ti 9 LA DBMOCHACIA Ojbictob: LUIS MUÑOZ RIVKK.A cf mtn úlrador Gerente ; QUINTÍN K. 8AU JÜRJO lNOK, 2 DK OCTÜERK DK 1806 LA COALICION El partnlo conservador peninsular se halla próximo á tener un nuevo fraccio namiento. Fué el primero la disidencia del gru po Hilvelista, pie toma este nombre de u jefe Heñor íSilvela, talento sagaz y el orador más cáustico que existe en Es paña. Dibújase en perspectiva una segunda división: la de los incondicionales pu ros, intérpretes acabados del incondi cionalismo político, que siguen las ins piraciones del señor Homero Robledo, el más variable de nuestros hombres públicos y el más funesto, también, á la vida de las colonias. No es que el pollo autequerano alce, por su voluntad, la bandera de la rebe lión contra los prohombres de su grey. Las circunstancias le obligarán á ello, si es verdad que se han coaligad", como dicen, con el único objeto de atacarle, Pidal, Elduayen, el Duque de Tetuan, y otro conservadores eminentes. Los desplantes é intransigencias del romerismo llegan á un grado intolera ble; son tan dañosos al buen gobierno de las dependencias ultramarinas, á la marcha política nacional y aun á la propia reputación del conservatismo histórico, que se hace necesario .impo nerle un escarmiento y señalar un lími te á sus audacias. Estos son los motivos, muy podero so. por cierto, á que obedece la coali ción. K m2ro Robledo, como político, es so1)ji'ok y vanidoso; bien lo ha demos trad j cu ui versas ocasiones. Fuen es presumir que no retrocederá un ápice en los derroteros que ha se guido hasta hoy; y con esto, dicho que da que "no habrá de avenirse á las fór mulas amplias y progresivas que de mandan las necesidades de la nación, tanto interior, como exteriormente. Su rebeldía será manifiesta, á menos (pie el señor Cánovas se ponga de su parte, en cuyo caso los rebeldes serán los otros; es decir, la parte más granada, mas sana y mas prestigiosa del partido conservador. Pero esto revelaría una debilidad, por todo'extremo censurable, en el Presiden te del Consejo; debilidad que podría ser de funestos resultados, en las actuales circunstancias. Cierto que, una vez, cuando la famosa excisión entre Silvela y Romero, come tió Cánovas el error de apoyar al segun do, restándose de tal modo elementos valiosísimos, que siguieron los rumbos de su preterido lugarteniente. JIirt los tiempos ha cambiado: no son los mismos. De observar, hoy, igual conducta que ayer, conquistaríanle sus preferencias las censuras del pueblo español, que atribu ye á la facción romerista principalísi ma parte; la mayor, en los dolores que, nos :illigcn. V hoy mas que nunca necesita el se ñor Cánovas de todo su prestigio, de to das, sus simpatías, para gobernar con acierto. La coalición indicada demuestra una verdad consoladora en estas épocas de continuos desengaños, y nosotros debe mos tenerla muy presente, porque á nos otros afecta más que á nadie. Y es que en la Madre Patria ' se va operando, por la inlluencia de los sucesos, una reacción favorable al liberalismo antillano. Será lentamente, poco á poco, paso á paso, pero el avance es notorio, Fíjense nuestros compatriotas. No son ya ios republicanos quienes combaten, acerbamente, las perjudicia les intemperancias de Romero y sus se cuaces. No son tan solo, unidos á ellos, los fusionistas. La protesta surge, vigorosa y enérgi- 1MC0MPAEMES PARA SIEMBRA DE TABACO Se venden loa f am isos cercados nombra do! ,,Gairibaldi"y "S )uifcont"; el primero de 152 cuerdas da extensión y el secundo de 80 cuerJHí; terreuo todo llano, de primera cali dad y superior para tod j cultivo; no h sido nuDca roturado desde qae se desmontó. Amboi cercdo3 sembrados de yerba de guiñe están divididos por el río Cañas. Se asegura que dichas 233 cunrdas da yer ba de g-dnea ej lo m4s espléndido en esta clase de pasto." Pueden venderse dichos cercados separa damente. lra la condiciones de renta en tenderse con su dueño que lo es tambidn de la hacienda "Amella", en cujas terrenos hay abundantes é inmejorables pastos de yerb de guinea, de maloj lio y grama qne se al quilan para g toado vacuno y caballar. 21 da Stbre. da lí-96 1 nq d. NQBTHERM ASSURANCE COMPANY DE LONDRES ESTABLECIDA EN 183G Foudod ncnmulatlos $22 220.000 oro. Seguros coutra incendios, premio stima mentes moderados. Pronto pago fie pérdida por lo apoderados generales de la Compañí RAMON CORTADA Y Cr Agentes en Poner, Julio 14 do J&06. Antonio Sáuibez vende un piano en buen CStd0. Dirigirlo si Prcfefor RaMo que viv n la cali de Atceha, prclrigacidu Norte. 88 ca, en el seno mismo de la colectividad donde ajuel grupo milita: el señor Ro mero es combatido por sus propios co rreligionarios. Dirán los timoratos que esto es incon veniente é inoportuno, porque quita ro bustez al esfuerzo gubernativo, cuando mas necesita de concordia v cohesión , Lste argumento, aplicado á los repu - blicanos ó ú los liberales demócratas, leimna una íogica íncontrastaoie. A 1 1 F . . 1 Dichas agrupaciones constituyen fuer - zas positivas y, por lo tanto, su concurso es de elemental importancia en todos tiempos; especialmente en los días de grandes crisis. iSo así la orgullosa falange del señor para destruir los males que afligen á lalel cual, no sabiendo de gallos porque patria. , . 1 no se es ilustrado en todo, y el señor Homero, que nada vale ante la opinión, que cantaban atrozmente. Bajéyencon y que así en la paz corno en la guerra tré á los gallos, en compañía de ciento solo ha sabido agitar la tea de ladiscor- y tantas personas, que estaban allí con día, pedir cadenas en vez de libertades, introducir el desbarajuste en la adminis-1 tración, y desacreditar en Esjjaña, y fue-1 ra (te n,spana, el régimen de la ALonar- quía. Esto no lo decimos nosotros. Lo dice, á diario, la prensa indepen diente española. Lo proclaman los sucesos. Hacemos votos porque la coalición prospere y triunfe, va que se apresta á combatir al enemigo mayor de nuestras libertades. Pésele JParí PAKA E. T.EPKLLET1KR. CE a U Echo de París) JNo tiene nada de raro, ni de vitupe rable, que parezcan mal á usted los ex cesos á que se entregaron últimamente los aficionados de la Plaza de Toros de Marsella; ni que usted crea á lo que presumo, que el espectáculo tauromá quico es más cruel que el tirón de pi chón, las carreras de caballos, las tortu ras acrobáticas de los niños clowns, el pugilato de los boxeadores británicos y yankees y las pavorosos hazañas del tur co Yousouf, quien, en lucha con un compatriota suyo, organizada por el di rector del Gil Blas, quiso alevosamen te asfixiarlo, con singular regocijo del público, cuyas mujeres, según observó Clemenceau, daban grititos de placer, mientras que los hombres, todos deca dentes, arañaban maquinalmente las pinturas de los palcos, en una epilepsia del corazón que pedía la muerte. Tocado usted, señor Lepelletier, de lo que llamo 1 aillade la teudresse a qua- tre pattes, es claro que tiene íncontes- ble derecho á filosofar sobre las corri das de toros, pidiendo que se les haga merced de la vida, aunque usted decla re que no siente particular estima por tales bichos, frente a los cuales, cuando se les tropieza en el campo, debe guar darse una distancia respetable. Creo lo mismo que usted, y le aseguro formalmente que cuando he visto venir un toro, en el campo, lo primero que se me ha ocurrido es subirme a un árbol, como el inglés que narraba las peripe cias de un amigo suyo que fué devorado por un tigre yendo ambos de caza en la India, é interrumpido en el relato por alguien que le pregunto como había de jado que el tigre consumase su fechoría, repuso tranquilamente: A 1 I ? 1 . 1-1 Ti.n; jí,s que yo estar suoiuo en un árbol. También' está usted creer que las carreras graciosísimas. A mí, cha, no me han hecho en su derecho al de caballos son la verdad sea di- reír; pero, como sobre r ustos y espectáculos no hay na da escrito, podemos convenir en que las carreras de caballos son un iaso de ri sa. , Cada pueblo, como cada individuó se divierte a su modo. El año pasado conocí en la casa del señor León y Cas- uno a un notaoie abogado de Canarias, 1 rii , . , uon íuniíis sarcia, ísieno ele cuerpo entero y por lo tanto gallero, y hablan do con él de las riñas de gallos, me dijo: rn -i . -i . j. engodos lacas ue lo que no hay en el mundo, y van á ser para us- Leu. imi cuanto regrese al pueblo se las enviaré COLMADO PULPERIA CAFE RESTAURANT Calle Isabel, esquina á Mayor En este e&tablecimiento se encontrará constantemente al detall: Arroz valenciano sin mezcla. Luz diaman-1 . , . ,, . i - I te americana legítima, Manteca fina de cer do, Chocolate de la acreditada marca Paro- di, Alcohólalo B irné-i, Oifó en polvo ga rctida su purezi Pastas dé varias clases, Vinos de Alella, Navarro, Cepa tle Macón, Jerez. Moscatell. etc.. etc.. O carril os de varias marcas, Azúcar central y moscabada. Ron de la sin rival marca Aguila" á 30, 35, 40 y 50 centavos botella. S rops: de frambuesa, almendras, cebada, tamarindo, pifia, zarzaparrilla y limón. Dorante la noche: Ce?ias, Café y Choco lote, á cargo d don José Sílvatnlla. -itma. Penca. S ptiembre 21 de 1896. AUGUSTO PASARELL RIUS Procurador en ejercicio inscrito en la Audiencia y Juzgados 3DE 12. POISTCE Setbre. P. P EL RC El De estas afamadas bicicletas americanas lry de venta en La IIortcnsia . Son la mas e'egantes, sólidas, ligeras, camodas y baratas Vista bace fé. Stbre. 16 del 9G lm a La Democracia De Canarias fueron á Cádiz, donde las reexpidió un amigo del señor Gar cía; de Cádiz á Madrid, donde las reex pididió otro amigo del señor García; y de Santander me las mandó al Havre mi amigo el doctor Toca, consignándo las á otro amigo mío, el señor Toda, I cónsul de Esnaña en amiella oblación: . 1 r - 1 Toda lo es en muchísimas cosas me I preguntó por telégrafo si se comían los I .. I gallos con arroz. 1 Por fortuna, el señor Albiñana, vice I cónsul, tuvo la buena idea de meterlos I en el tren v una mañana vino la portera I de mi casa a advertirme que había tou lie eu el portal, porque habían llegado I para mí unos pájaros (sic), muy raros, I la boca abierta, preguntando que era eso, porque en París se ignora todo lo de extranjís, y algunas de aquellas per- sonas, que eraji vecinos míos, se queja ron del cantío, por lo que no tuve mas remedio que dest errar á las fieras, lie vandolas a un campo de mi amigo y paisano el señor Ventura. Pues bien, señor Lepelletier: Venga usted á contarnos, al señor García v a I mí, que unos caballitos son más gracio I sos y valen más que estos gallos, cuya llegada representa innumerables moles tias y gastos, la perplegidad de un con sulado y el asombro de todo el quartier de l'Europe! Luis BONAFOUX. ADIESTRO Y SINIESTRO De la guerra qué se sabe? Nada resulta probado; mas la situación es grave. Ya se sabrá el resultado .... cuando acabe. Y cuándo acaba, en verdad, pues eso me tiene en ascua? No sé; tal vez por la Pascua ó tal vez por Navidad. Y usted jque opina en resumen acerca de-la cuestión? Eso ... en teniendo cacúmen . . . . ; mas respecto á mi opinión no he de darla, aunque me emplumen. Cómo yo, siendo un bolonio, he de saber cuando acabe, si á estas fechas no lo sabe : ni aún el mismo don Antonia? :- Y Weyler?.. .. Seguramente se halla en idéntico caso; pero ya saldrá del paso sin que afortunadamente le sobrevenga un fracaso. Usted es patriota? Sí! De los buenos? No que no! Vamos, lo mismo que yo; pues aprenda usted de mí. Deje usted que el tiempo ruede; que la tremolina suba; j ya veré lo que sucede, pues á la postre no puede ser independiente Cuba. Antes se hundirá en el mar, y ya que es usted patriota gastará la última gota de su sangre, sin chistar. Y siendo usted, como es, ducho, si la insurrección aprieta, ha de gastarse con mucho placer, la última peseta y hasta el último cartucho. Luchará usted sin desmayo contra la hueste insurrecta. Para qué, por línea recta, desciende usted de Pelayo? Aunque, en apariencia, esté la cosa bastante mal, los patriotas como usté deben tener mucha fé en la causa nacional Ya se vé. En tan aciagos extremos si es que la patria querida necesita nuestra vida con gusto se la daremos. Todo, todo, de contado hay que darlo por España. Imitemos al soldado ! Es que yo soy empleado y no pienso ir á campaña. No es que me embargue el temor. Nadie me vence en amor á la patria, que hoy se arruina, pero le sirvo mejor encerrado en la oficina. ENFERMOS DEL ESTOMAGO JEá conveniente convencerse de que el positivo, lo uaoo que cura radicalmente eje deoe ver que caaa ooiea presente granadas Dispepsia, y (Jon sus síntomas agrios después de las vientre con poco que se coma, digestiones ñngnancia, dolores de vientre, vómitos biliosos o- - - e JJ ' Son enfermedades que según reconocen nocidas enfermas de muchos años, garantizan, mente con el DIGESTIVO Habana Laboratorio Qaímico Farmaceatira de Drimera clase del Lilcermiadn Mujarrieta, Dragonea 64, Sarrá, Joknson y Junio jlz te I8i)ü. 6 m. d. LA NINFA PROVEEDORA DE i CAMISERIA SOMBRERERIA DE FELIPE Fortaleza, 32? PUERTO Gran surtido en Camisas, Camiseta', FañaeIo8, Ca'zoncillos y JiotonadnraA de ú.tima moda. ASOMBREROS DE TODAS CLASES Y FORMAS 1 a d. San Joan de Puerto-Rico, Jalio 23 de 1896. oro EN 9 noniía y prontitud m FU "P LA NUEVA DESDICHA (De El ITeraldOjáe Madrid) La triste noticia ha debido ya difun dirse por todas partes. Ciando el público comenzaba á creer que se habían exagerado los peligros de la conspiración filipina, y acaso las pro pias autoridades descansaban en la con fianza de haber descubierto el vasto complot de los enemigos de España, es natural que cause pena y sobresalto en todos los ánimos la explosión de este nuevo movimiento revolucionario, que tiene por teatro al país más pacífico del mundo. A ciertas gentes pudiéramos pregun tar ahora si los peligros de Filipinas eran visiones del periodista señor Mar5 queta y del diputado señor Retana. Pero no es día el de hoy el de formular cargos contra nadie, ni de señalar á la censura pública el descuido y ceguedad á que son debidos los sucesos de que da el cable noticia. Lo único que nos tocapero gUs tropas, como las que después es prepararnos á sufrir esta nueva con- iraneuau con espíritu seieiiu y . uumi- narla con tanta energía como rapidez. - 4,7 A Confiemos en que el Gobierno, que ha cumplido bien sus primeros deberes, los sabrá cumplir hasta lo último, sofo- cando ahora la rebelión y destruyendo luego sus raices. El presidente del Consejo de Minis- tros, hablando entre varios periodistas, lía expresado la confianza de que el rao- j. a vimiento insurreccional quedará vencí - üo muy pronto; pero no oouna ei jiioi Cánovas que una rebelión es siempre grave en Filipinas, y mucho más grave en las circunstancias que España atra- viesa hoy. Cree el jete del Gobierno que, desde la guerra de la Independencia, nunca las tuerzas de la nación se nabian visto sometidas a tan rudas pruebas como al presente; pero fía en el patriotismo de todos, y espera que nadie se rehusará á cuantos sacrificios sean necesarios para conservar la integridad del territorio, I i : .t r í. :i a .- Al nacienuo árente, eou varoun entercan, cuantas desventuras han caído sobre nosotros. De esto no puede dudar el señor Cá - novas, ni los demás hombres públicos que llevan con el la dirección de los ne - gocios, ó que esperan a tomarla cuando él la deje. Bien se ha visto, con ocasión de la guerra de Cuba, que las energías del país son inagotables, y no menos inagotable nuestra paciencia. Sin reci - bir ni pedir cuentas del uso que se hace de la sangre y peculio de la nación, con una y otra han acudido los españoles a defender los restos de aquel gran imperio americano que todavía conservábamos en la época á que el señor Cánovas se refiere, cuando ejércitos extranjeros i - vadían la Península y llegaban hasta Cádiz. Lo mismo acudiremos á salvar á Filipinas, aunque allí hubiera de abrirse rDios no lo quiera! otro nio semejante ai de Cuba. Mas vean los Gobiernos y los hombres políticos que estas calamidades que por todas partes nos estrechan y abruman son efecto del su imprevisión, de su descuido, muchas veces de su ignorancia y su falta de - . . ' i paciuau para mandar, y procuren poner-1 1 - se á la altura de los gobernados. Con eso bastaría para salir triunfantes de cuantos peligros amenazan á España. iln estas horas de angustias no es lí-1 cito, sin una gran abnegación arriba, peuir sacnucios a nauie, jOS trioutos del patriotismo deben empezar a pagar- se desde lo alto. EL RASTRO DEL GENERALISIMO (De El Ttnparciál de Madrid) distraída la atención publica por ios r- . . sucesos que ocurrían en la parte occi 1 j11 11 i uentai isla, perdí el rastro del genera- DIGESTIVO MOJARR1ETA es lo único laa enfermedades del Avarato Dioestivo. las palabras Digestivo Mqfarrieta: Gastralgia comidas ó Acedías, hinchazón 6 haho al lentas ó penosao qns producen sueño, re- y diarreas jrónicas. A i: 3 los mélicos, y cartas H& personas mav co sólo se han carado y se curan completa MOJARRIETA Lbé y Tjr ralbas. Pto.-Ríco, Gaillermsty. REAL CASA Y TREN BE LAVADO ORTIZ - BICO irto, 32? Caeüos, Puño?, Coibata, Calcetines ESTA mPRENTA se hace m la toda clase de trabajos con elegancia, eco lísimo insurrecto, de quien no hemos vuelto á saber desde el combate con Jiménez Castellanos en Saratoga. Por aquellos sitios estaba Máximo Gómez al publicarse mi carta con noticias y deta lles de su vida de campaña; pero mi in formación, con ser tan verídica en este punto, no me hizo sospechar siquiera en la posibilidad de un ataque de Máxi mo á nuestras tropas. Aún hoy, des pués de tanto. tiempo y de tantas noti cias acumuladas y bien depuradas, exis te en mí el asombro por aquel hecho, en el generalísimo insurrecto, inusitado. Es el único caso, y apelo á la crónica de toda la guerra, en que Máximo - Gó mez ha tomado la ofensiva. Acaso fué por la superioridad numérica de sus tro pas? Acaso le animó alguua deficien cia del campamento nuestro, creyendo que podría fácilmente destrozar la co lumna de Jiménez Castellanos? Lo pri mero es verosímil, lo segundo no, pues ta míe en combate tan lírolongado, la I buena organición quedó demostrada m : . . . , Nuestras tropas se retiraron, conti miando por algunos días en Saratoga Máximo y, según dicen, también Calix to García, sin que nadie les molestara I porque nadie ha entrado eñ aquellos I m0ntes. El general Mella fué el que I más se acercó al comienzo de la guerra se han acercado, arañaron, pero nada nías, ías iaiuas ue aqutmo kcuhiuco. T.a nermanencia de Máximo Gómez j en Najasa ha, durado más de dos meses Yo le atribuí su llegada a aquellos si tios por los últimos días de Mayo, y mis informes han resultado exactos, puesto I que en la alocución dirigida a su gente j y que tengo á la vista, por el titulado I gobernador civil del Camagüey, La Mo 1a v Mora, fecha 30 de Mavo, se dice I J 1 qUe el generalísimo acaba de llegar a ijamaguey y se excita a tocios u que va I yan á saludarle Nos lo encontramos después á orillas del Cauto en los primeros días del mes de Julio, puesto que allí están fechadas i las cartas dirigidas al gobierno ue la re pública notificando la muerte jle José i Maceo, y allí también esta escrito por el propio Máximo un artículo de recuer I lo al general mulato. El artículo ha sido publicado en el periódico El Cu I baño Libre, impreso como es sabido en plena manigua oriental. Lleva el nú , , . , ti . r i mero la iecna del cíe juno y toa o I está dedicado á eusalzar los méritos que I como guerrero tenía José Maceo, ve cu 1 yo valor ni nosotros mismos podemos I dudar. Era acaso el mas valiente de to dos los insurrectos. I JN o taita entre sus apologistas quien I recuerde, y yo lo consigno, para que si I aún viven tan malos patriotas, sientan I el remordimiento de su crimen netando, 1 aquellas evasiones que realizó Maceo de I Ceuta primero, de Manon después, gra I cías a la venta de algunos de sus guar I dianes I Pues bien; el artículo de Máximo Gó I mez, algo menos cursi que los de escri- I tores bien reputados de estas tierras, re 1 cuerda las terribles epopeyas de Balma- I seda en el tristemente celebre Cauto, I durante la guerra anterior, en que las I I aguas de ese río llegaron á ser rojas de abis-ltanta sangre por unos y otros comba- I tientes derramada. Para que sus racuer I dos sean más constantes, en ese mismo I sitio recibe la noticia de la muerte de José Maceo, cuya importancia en lague I rra, solo nosotros los españoles he- ca-linos discutido iviaximo ijromez no puede ocultar su s f -i i . I honda pena ante la desaparición de los I más allegados. Eramos seis dice los I que llegamos juntos á pelear en esta guerra, y ya solo quedamos tres. Los I muertos á quienes alude son Martí, Gue i rra y Jíorrero domingo BLANCO. UNA INTERVIEW ' SOBRE ESGRIMA El método de enseñanza que ha des arroiiuuo uon jóse xomas Aizoi, en los n.rtfenlns rmllií?irlra nnv TÍM ll-,!-. - Ji T ' rr r ii baj0 el lema de Ago gobre eS;rima ,v,vvkj 1' A OID deberían seguirlos en todas sus partes, como dice el peritísimo maestro don lEUMC'lF Licenciado Don Carlos L6$es de Tord Juez municipal de la Ciudad de Ponce Por el presente hago saber: que en el ini cio verbal sobre desahucio, interpuesto por don Tomás Monsanto en representación de don Ramón Cortada y Quintana, contra doD Alelanaro OaUasa. se ña disDuesto la venf en pública subasta de los bienes siguientes: Aparadores con sus correspondientes vi drios, dos mostradores grandes, uno pe queBoconsas vidrieras, una banqueta de tabaquero, cuatro Daños de reina v a! nía fóa en que están montados les primeros. El acto del remate de dicha j muebles, oue uu biuu ihbsuos pericialmente en a canti dad de 313 pesos, tendrá lucrar anta at J uzgado a la hora de las diez de la ma nana del dia siete del entrante mes de Oatn ore, no admitiéndose Dostura alguna oa tu uuura js uos terceras partes de la tssacióo I 1 1 a . .O . T practicada y debiendo los Iicitadores consie nar previamente en la mesa delJuzado una cantidad igual al diez ror ciento del uo la tasación de los bienes qne se sacan a remate, sin cuyo requisito no serán admiti- uos. i Dado en Ponce a.veinte v . ña Síintífim. bre de mil ochocientna tinvAnta v va Scret-rio, Enrique Colom y Ferrer. SE VENDEN DOS PIAMOS Uno f raucés. Otrod Lrch de Bircelona. mnv barato y en muy buen estado. También se ofrece á los señorea composi rores y afinadores de pianos loa materiales necesarios como cuerdas, bordones, fieltros. gamuzas, etc Todo muvba.r.trt hembrVde isx Job 3, tuna 5 lenta a la Guardia OiviL S -ÍERTO GRAHAM EduarcT HQEHISnO ejercicio. Puerto-Rica veniente tl-.'.--í.-ü.'. - u' para ampliáudolo, lo publicara en forma libro ó folleto, pues asi poana conser varse más fácilmente y sería una ol,ra de consulta en cao necesario. Departiendo con tan competente j.r,. fesor sobre el sistema de lección jue indica debe practicarse para (ue tl afumno pueda sacar provecho, hube ,je manifestarle que me parecía excesivo el trabajo impuesto al maestro, tpdo vez que de seguirlo al pié de la letra tenía que perder mucho tiempo, no imleinni zable con los honorarios que le pagaran sus alumnos. No deja usted de tener razón, iK. dijo, pero bueno es que sepa ustel que en esgrima existen dos clases de lección; la de la sala, que se toma en presencia de los demás alumnos, y la particular que tiene lugar á hora determinada v dedicándole el profesor el tiempo que so estipule en las condiciones pactadas. Entre una y otra lección hay notable diferencia : en la primera se limita el maestro á dar los turnos previamente convenidos, en corregir las faltas, su detenerse mucho, tomándose interés si, pero relacionado con lo que cala alumno le abona y contando el tiem po que le queda para dar clase á J,.s otros discípulos que se hallan presentes y aguardan con impaciencia su turno. En determinado dia de la semana, los sábados por regla general, el dia de asalto, como suele llamarse, acostumbra el profesor á tirar con uno ó dos de sus educandos más aventajados y asaltando los demás, los unos con los otros, pero corrigiendo siempre el maestro los de fectos é indicándoles como deben hacer el movimiento que sea de ocasión, para conseguir el resultado deseado. Los jueves no dá lección ; es costum bre ya establecida que ese dia lo dedi que al descanso. El alumno en la lección de sala no puede exigir otra cosa sino simplemente su lección. Si el profesor asaltare con él, siempre lo hará á título de gracia que quiere concederle, pero nunca por ha llarse obligado, l'or esta lección ,e cobra generalmente, aun en las capita les de provincias de tercer orden, á seis pesos mensuales, siendo de la propie dad" del aprendiz las armas y demás enseres : debiendo añadir, que en la citada cuota no se incluye el baño de ducha, que en toda sala de armas bien montada existe, por abonarlo separada mente el alumno que lo solicita. Tam bién es costumbre gratificar alienado qu3 presta sus servicios en el cuarto u.tí aseo; en algunas salas, corre por cuenta de los discípulos el sueldo de este dependiente. En la lección llamada particular se le paga al maestro lo que pide, se tasa el tiempo, nadie espera y puede desple gar todo el celo que crea indispensable, y si el alumno tiene aptitudes puede sacar provechoso fruto de las lecciones que reciba. Además de lo manifestado añada usted, que el profesor asalta, des de su principio, con el alumno, sin de- iarle tomar vicio alguno, y lo vá con- (luciendo insensible y rroil iti lm jMit t luir el camino que debe seguir, para llamar se en su día aficionado dér primera tuer za; y convendrá usted conmigo, amigo Hoyos, que entre una y otra lección es preferible, pero muy preferible, la se gunda, que si bien á primera vista pa rece más gravosa por el mayor estipen dio que ha de exigir el profesor, ha de resultar la más económica, pues el in terés que se toma el maestro en esta en señanza puramente individual, y el mayor tiempo empicado en los ejercí- cios, Hacen mas breve el aprendizaje más sólidos y seguros los conocimien tos que se adquieran, que los que se puedan conseguir en la lección de sala. Este es, amigo mío, mi modo ue pensar; procure no olvidarlo siempre. que tenga que tomar uu profesor de es- orrímo t. . Y el mío también, le contesté, con vencido ante las razones del ilustrado profesor señor Tizol, quien á la vez t's un caballero distinguido, un puertorri queño de valer, un militar pundonoro so y-un amigo apreciabilísimo. AMÓ HOYOS DELGADO. Capital, 30 Sbre. 1896. LA MEJOR CLASE DE i marca OH. DESCHOUDENS. fabncado to la hacienda EUGENIA Añasco pe venfle en pl establecimiento de don Tomas l01" lora, calle de la Salud, esquina a la ao ia Luna. Setiembre 18 de 1896. 1 El a. PORCELANAS ILUMINADAS POR MARIA MOLINA De de 12 reales hasta 5 pesos una Se hacen reproducciones en este sistema á precios convencionales. Las familias de la Isla que remitan laa fotografías por correo se les remitirán fran cas de porte & su destino, garantizándoles el trabajo Molina.fotdgrafo, Aurora, entre Ma jor y Salud. Fidan el bonito mostruario qne hy para remitir á demicilío. Setiembre, 3 de 1896. 1 na.at. e compran acciones del Crédito y Ahorro Ponceflo. Ea esta imprenta iDformarán. Ponce. Mayo 25 de 1895. IBazar tero RON fe?) O VI EN FRANCES coHpBiraiaos d vichy íf ; .- ; -;V. r V r i í i